Tijuana, B. C. a domingo 26 de febrero de 2017.
A través de esta carta y en el marco del 60 Aniversario de nuestra Universidad Autónoma de Baja California, deseamos exponer a la comunidad estudiantil y a toda la población de nuestro estado un informe de lo que ha ocurrido en últimas semanas, a raíz de las cartas, entrevistas y videos que hemos dado a conocer, los cuales han llegado a miles de personas gracias al valioso apoyo de la ciudadanía y de los medios de comunicación.
Desde un inicio alertamos de que autoridades universitarias pretendían que los cursos y talleres culturales pasaran a manos de Uniser, una asociación civil que la UABC, conforme a su normatividad, considera una Entidad Universitaria Auxiliar. Esto implicaba el despido de 15 de los 26 maestros que venían laborando hasta fines del año 2016 y, en consecuencia, el cierre de varios cursos de danza, música y artes plásticas, además de que a los 11 maestros restantes se les advertía que solo continuarían un semestre más. Los propios maestros que serían despedidos fueron enterados de esto por directivos de la Facultad de Artes, quienes lo informaron de manera oral, pero no escrita, argumentando recortes presupuestales y que los cursos no eran autosustentables, a pesar de que tienen gran demanda y están al tope de su capacidad. Esto puso en peligro cursos de calidad que la UABC ha venido ofreciendo a precios accesibles, en beneficio no solo de estudiantes universitarios, sino de la comunidad en general. Tan solo en Tijuana, el cierre de espacios afectaría directamente a más de 400 estudiantes, incluyendo a personas con capacidades diferentes.
Fue a través de la página “No a la privatización de la UABC” en la red social Facebook, sumándonos a marchas pacíficas y logrando entrevistas en diversos medios de comunicación que nos brindaron su apoyo, como pudimos dar visibilidad a lo que estaba ocurriendo y captamos la atención de la comunidad, que solidariamente compartió nuestras publicaciones y nuestra exigencia de tres demandas centrales:
1. Impedir que Uniser se hiciera cargo de los cursos de danza, música y artes plásticas, como ya lo ha hecho por varios semestres con los cursos de idiomas, cuyas cuotas de inscripción ya superan en algunos casos las que paga al semestre un alumno de licenciatura, dado que se han incrementado en forma desproporcionada. Asimismo, se buscaba evitar que Uniser tomara el control de los cursos porque sustituiría a la UABC como patrón de los maestros, lo que implicaba contratos sin las prestaciones de ley, aunque se usaran instalaciones y recursos de una institución de servicio público.
2. Una segunda demanda era la de evitar el despido de maestros de probada trayectoria y capacidad, que han mostrado entrega y dedicación en la enseñanza de una disciplina artística que les apasiona.
3. La tercera exigencia era evitar la reducción de la oferta de cursos y talleres, dado que al despedir docentes se cerrarían espacios que por décadas la UABC ha abierto a la comunidad, cumpliendo la tercera función sustantiva a que está obligada por su Estatuto General y su Ley Orgánica: la extensión y difusión de la cultura. Los cursos y talleres culturales permiten a la comunidad una formación integral al alcance de sus recursos económicos, promoviendo las artes, que además contribuyen a la prevención del delito y adicciones, por lo que resultaba preocupante que nuestra universidad pretendiera abandonar, al menos parcialmente, este compromiso.
Tras los esfuerzos para dar visibilidad a estas tres demandas, gracias al valioso apoyo de agrupaciones civiles como “Democracia Social”, a los medios de comunicación y a la misma comunidad, podemos informarles que hasta el momento solo se ha obtenido de las autoridades universitarias y directivos de la Facultad de Artes el compromiso, de palabra, por cubrir algunas de nuestras exigencias y de forma parcial.
En días pasados, autoridades universitarias comunicaron a los maestros impulsores de este movimiento –aunque esto no se ha formalizado en un escrito– que 9 de los 15 maestros que inicialmente serían despedidos, serán recontratados en los mismos términos del semestre anterior; asimismo, que de los seis maestros restantes, cuatro no podían ser retenidos, uno había renunciado voluntariamente y otro no había aceptado la recontratación. Igualmente, informaron que en próximos días iniciaría la inscripción y promoción de los cursos reabiertos que estarán a cargo de este personal recontratado.
Sin embargo, aunque los 9 maestros referidos en el párrafo anterior serán recontratados por la Facultad de Artes, con las prestaciones de ley y manteniendo a la UABC como patrón en su relación laboral, autoridades universitarias anticiparon que será Uniser quien de ahora en adelante contrate a todo el nuevo personal que sea contratado para impartir cursos y talleres culturales.
Aun cuando reconocemos la voluntad manifestada por nuestra Máxima Casa de Estudios al confirmar oralmente –no así por escrito– que se reinstalará a parte de los maestros que impartían los cursos y talleres culturales en 2016, quienes impulsamos este movimiento deseamos reiterar nuestro exhorto al doctor Juan Manuel Ocegueda Hernández, rector de la UABC, y le solicitamos respetuosamente lo siguiente:
1. Que los cursos y talleres culturales no pasen a ser administrados por la asociación Uniser, como se pretende, considerando que su experiencia con los cursos de idiomas ha repercutido en una alza considerable en las cuotas de inscripción; como ejemplo de lo anterior, podemos mencionar el costo de cursos de inglés, que pasó de una cuota de 2 mil 800 pesos en el semestre anterior a 3 mil 600 pesos en este semestre. En suma, Uniser tiene otro gran adeudo con la comunidad universitaria: la gran opacidad que mantiene en materia de transparencia y rendición de cuentas.
2. Que la Facultad de Artes formalice por escrito en una carta compromiso lo que informó a los maestros de cursos y talleres culturales, en el sentido que permanecerán contratados en los mismos términos que el semestre anterior.
3. Que se reinstale a los cuatro docentes que no planea recontratarse, no solo por tratarse de personal calificado y comprometido con la institución, sino porque despedirlos causará el cierre de espacios y oportunidades para muchos estudiantes.
4. Que se realice una amplia difusión de los cursos reabiertos durante todo el semestre actual, a fin de que la comunidad tijuanense esté enterada de que estos cursos continuarán abiertos con los mismos precios, dado que iniciarán a destiempo y es posible que muchos de los alumnos que buscaban reinscribirse ya hayan comprometido el tiempo que antes destinaban a esta actividad. Estas circunstancias están fuera de nuestro alcance, por lo que lo exhortamos a que no se pretenda atribuir a los maestros una eventual disminución en el número de estudiantes inscritos. En virtud de que los cursos reabiertos iniciarán casi después de un mes del iniciado el semestre, no pueden ni deben ser el parámetro para valorar la importancia de los cursos y la demanda que sí existe en la comunidad.
5. Que Uniser, conforme a las obligaciones que le marca la normatividad de la UABC, brinde a la comunidad universitaria un informe de actividades y financiero anual, en aras de la transparencia que debe regir a una institución de servicio público. Lo anterior a fin de conocer el monto de los ingresos que Uniser ha captado con la oferta de cursos de idiomas, a qué los ha destinado y, sobre todo, de qué manera está acatando la obligación –que legalmente tiene como Entidad Universitaria Auxiliar– de ayudar a la UABC a cumplir sus fines.
Los maestros impulsores de este movimiento deseamos agradecer a los medios de comunicación y a las y los estudiantes que elaboraron cartas, reunieron firmas o participaron en las marchas pacíficas, así como a toda la comunidad que se solidarizó con esta causa, reconociéndoles su valor cívico, dado que la Universidad Autónoma de Baja California es orgullo de todos los bajacalifornianos y, por lo tanto, protegerla en el cumplimiento de sus fines es una obligación que compartimos todos.
Finalmente, en virtud de que la Universidad mantiene firme su intención de que Uniser sea quien contrate al nuevo personal para cursos y talleres culturales, nuestra lucha seguirá porque más que un trabajo, están en juego valores como la legalidad, la justicia y la transparencia, así como la defensa de la formación humanista que debe prevalecer en una universidad como la nuestra, hecha de personas visionarias, nobles y comprometidas que, como reza nuestro canto universitario, todos los días intentan con esfuerzo, con certeza, la realización plena del hombre.
Muchas Gracias.
¡NO a la privatización de la UABC!
¡NO al cierre de talleres culturales!
¡NO al despido injustificado de maestros!
Atentamente
Maestros y exmaestros de cursos y talleres culturales de UABC
