El presidente de la Unión Deportiva de Playas de Rosarito, Bernabé Hernández Armas, sostuvo que las protestas y conflictos que se han originado por la administración de la Unidad Deportiva Emiliano Zapata y el parque de Béisbol René Ortiz Campoy, son por causa de habérseles cancelado permisos para la venta de bebidas alcohólicas, a dirigentes de algunas asociaciones deportivas que desvirtuaron el objetivo de esas instalaciones.
Hernández Armas, se reunió con un grupo de ciudadanos para explicarles los objetivos de un programa de formación y de valores que involucra la creación de diversos centros de iniciación deportiva que operarán en campos de la Unión Deportiva de Playas de Rosarito, para niños de 3 a 12 años de edad.
Queremos que estos campos se utilicen para darle una formación a los niños y encauzarlos en la práctica deportiva para alejarlos de las drogas, por eso “una de las primeras medidas que tomamos, fue prohibir la venta de bebidas alcohólicas en los campos deportivos de la unidad”, expuso Hernández Armas.
Agregó que a raíz de la prohibición, grupos inconformes han externado molestias, porque “afectamos su intereses, que no eran precisamente el fomento al deporte”.
Según Hernández Armas, la venta de bebidas embriagantes en los parques de béisbol y de fútbol, que componen la unidad deportiva, se habían convertido en dos grandes cantinas que incluso en diversas ocasiones fueron causa de incidentes de violencia.
La venta de bebidas alcohólicas se había vuelto una de las principales actividades de estos campos, y eso incluso provocó que se alejaran las familias y los propios deportistas de este lugar, expuso Hernández Armas.
“No crean, pero a veces hasta miedo nos da, porque hemos estado recibiendo no solamente periodicazos, sino también amenazas, a raíz de que se prohibió la venta de bebidas alcohólicas.
Hernández Armas, enfrenta fuertes críticas de distintas organizaciones deportivas que lo acusan de apropiarse indebidamente de los predios, destinados desde 1970 para la práctica de béisbol y futbol.
Los que se oponen, son los mismos que quieren que esto siga siendo una cantina y no un centro de reunión familiar, sostuvo Hernández Armas.
Hernández Armas, se reunió con un grupo de ciudadanos para explicarles los objetivos de un programa de formación y de valores que involucra la creación de diversos centros de iniciación deportiva que operarán en campos de la Unión Deportiva de Playas de Rosarito, para niños de 3 a 12 años de edad.
Queremos que estos campos se utilicen para darle una formación a los niños y encauzarlos en la práctica deportiva para alejarlos de las drogas, por eso “una de las primeras medidas que tomamos, fue prohibir la venta de bebidas alcohólicas en los campos deportivos de la unidad”, expuso Hernández Armas.
Agregó que a raíz de la prohibición, grupos inconformes han externado molestias, porque “afectamos su intereses, que no eran precisamente el fomento al deporte”.
Según Hernández Armas, la venta de bebidas embriagantes en los parques de béisbol y de fútbol, que componen la unidad deportiva, se habían convertido en dos grandes cantinas que incluso en diversas ocasiones fueron causa de incidentes de violencia.
La venta de bebidas alcohólicas se había vuelto una de las principales actividades de estos campos, y eso incluso provocó que se alejaran las familias y los propios deportistas de este lugar, expuso Hernández Armas.
“No crean, pero a veces hasta miedo nos da, porque hemos estado recibiendo no solamente periodicazos, sino también amenazas, a raíz de que se prohibió la venta de bebidas alcohólicas.
Hernández Armas, enfrenta fuertes críticas de distintas organizaciones deportivas que lo acusan de apropiarse indebidamente de los predios, destinados desde 1970 para la práctica de béisbol y futbol.
Los que se oponen, son los mismos que quieren que esto siga siendo una cantina y no un centro de reunión familiar, sostuvo Hernández Armas.
