Expuso la importancia de conocer las diferentes formas de explotación a la que puede ser sujeto el ser humano.
Definió que quien comete el delito de trata de personas es aquel que induce, promueve, solicita, capta, consiga, traslada, recluta, mantiene, entregue o reciba para sí o para un tercero a una persona o grupo de personas.
Esta acción puede ser por medio de la violencia física o moral, engaño o abuso de poder, aprovechándose de una situación de vulnerabilidad, la concesión o recepción de pagos o beneficios para someterla a la explotación.
Orozco Alvarado indicó que las formas de explotación pueden ser de tipo sexual, trabajos o servicios forzados, extracción de órganos y prácticas semejantes a la esclavitud, tales como matrimonios forzados, mendicidad o servidumbre.
Puntualizó que cualquier persona puede ser víctima de trata de personas, pero los grupos de mayor riesgo de vulnerabilidad son los niños, mujeres migrantes y los discapacitados.
Anotó que con mayor facilidad son engañadas las personas que enfrentan situaciones de violencia, abuso, pobreza o desintegración familiar.
Como ejemplos, mencionó el caso en donde ofrecen una paga atractiva por trabajos sencillos como gancho, para atraer a las personas en situación de algún tipo de vulnerabilidad.
Les ofrecen realizar otras tareas, la mayoría orientadas a terminar en casos de explotación sexual, añadió Orozco Alvarado.
Hay personas, dijo, que desconocen ser objeto de trata, pues ignoran que tienen derechos, por lo que esta área de la PGJE, dependiente de la Subprocuraduría Contra la Delincuencia Organizada, trabaja en la prevención y la cultura de la denuncia.
Resaltó que internet se ha vuelto un factor facilitador para que las personas en situación de vulnerabilidad sean víctimas de cualquier forma de la explotación.
Hizo un llamado a los padres de familia e incluso a los adultos a ser cuidadosos en el tipo de información que comparten o a la cual acceden.
Una vez que esta Unidad rescata a una víctima, dijo, le explica que tienen derechos, tales como recibir orientación jurídica, asistencia social, educativa, médica, psicológica y laboral.
También para recibir seguridad y salvaguardar su integridad y la de sus familiares, así como la reparación del daño.
Explicó que en la capacitación a funcionarios públicos participa el Área de Víctimas del Delito, quienes también ofrecen los servicios y atención psicológica a aquellas personas que vivieron la trata.
En las reuniones se convoca a los delegados estatales y se abordan temas del ámbito social y también se presentan las acciones que las demás entidades emprenden y que representan un impacto positivo en la calidad de vida de los bajacalifornianos.